Arte callejero...

Había un señor que pintaba cuadros de artistas famosos en las calles del centro de Dublín. Lo hacía con pasteles, y a lo mejor se tiraba días o incluso semanas para acabar uno de sus cuadros, arrodillado en el suelo. Y eso teniendo en cuenta las inclemencias del tiempo, sobre todo en Irlanda, que no hace más que llover. Cuando eso pasaba, a lo mejor sus cuadros se tiraban los días tapados por plásticos, para protegerse de la lluvia. Pero otras veces, esa lluvia traicionera llegaba por sorpresa y no daba tiempo a tapar la obra... El trabajo de días se iba esfumando en segundos, y ríos de color recorrían el suelo a nuestros pies... ¡IMPRESIONANTE!.